EL PROBLEMA DE LOS ROEDORES

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Los roedores son omnívoros. Transmiten un gran número de enfermedades al hombre, bien directamente, bien a través de parásitos como pulgas, garrapatas. Su reproducción es extraordinaria, una pareja puede generar miles de individuos en un año. Son causantes de infinidad de daños materiales en edificios, alimentos, tanto royéndolos como contaminándolos con excrementos.

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Controlamos las poblaciones de ratas y ratones, utilizando los métodos más apropiados en cada caso, con visitas periódicas para verificar la efectividad.

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Para la presencia de roedores en las instalaciones se utilizarán:

A) trampas adhesivas o trampas de resorte que son inocuas ( no llevan venenos) pero de eficacia relativa, pues solo matan a uno o dos hasta que se revisan y se vuelven a activar.

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B) Cebos raticidas y rodenticidas de gran eficacia pero nocivos. Los raticidas se colocan sujetos por varillas dentro de portacebos de seguridad: caja de plástico duro antivandalismo dotada de llave de seguridad, nadie, excepto el técnico o quien tenga una llave, puede acceder al raticida. Estos portacebos se señalizan

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Después de la colocación inicial de estos puntos se revisan mensualmente, para activarlos, cambiarlos si se encuentran roídos y si se detecta mayor presencia, en alguna zona, se aumentara el número.

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Todas las visitas e inspecciones realizadas se analizarán en una ficha de control facilitando al contratante un parte de trabajo con las incidencias del tratamiento realizado.